Un 18 de febrero

-¡No puede ser ella! ¡Ella no! No me lo creo, ¡es mentira! Anna sería ncapaz de hacer una cosa así. Dime que es mentira Anna, ¡por favor!

Mx, 18/02/2004

Querido Diario:

Hoy es día 18 de febrero, un gran epro triste día.
Hoy hace 15 años que Anna y yo nos concemos, hoy es el día de su 15 cumpleaños.

Anna era un chica de estatura mediana, con los cabellos oscuros, oscuros como el oscuro universo; los ojos, de un marrón amarillento muy intenso; si te fulminaba con la mirada, tenías la sensación de que te penetraba dentro de tu cuerpo, que sabia lo que pensabas en eseinstante, y no podías pero querías evitar pensar. Cuando reía, los ojos se le encendían y la felicidad brotaba por todo su cuerpo. Tenia un estilo bastante especial, era original y solo suyo.
El primer recuerdo que tengo de ella, fue el día en el que cumplía 5 años. Cuando llegué a su casa vino corriendo, me cogió de la mano y sin dejarme ni entrar a saludar, me estiró y me llevó hasta su habitación. Ese día me regaló la que era y es su muñequita más querida. Era una muñequita de porcelana. Era exactamente igual a ella, hasta en la manera de vestir. Aquella muñequita fue y es de mis más preciados tesoros. A pesar de ser ella la cumpleañera, me regaló Anna a mi y, no al revés.

Hoy es 18 de febreo. Hoy Anna cumple 15 años.

Cada verano y cada navidad íbamos a pasar las vacaciones a un pueblecito muy pequeño apartado, entre las faldas de dos montañas al sur de Nueva Zelanda. La gente allí era muy tradicional. Tenían creencias muy antiguas. A Anna y ami nos gustaba mucho ir allí.

Había una pareja de hermanos que nos aseguraban que podían hacer magia, que nos lo contaban porque no éramos del pueblo pero que por favor no lo dijesemos a nadie, y menos a alguien de por allí. Cuando éramos más pequeñas disfrutábamos pensando que teníamos amigo magos; pero así como fimos creciendo no nos creímos aquel cuento, pero ellos seguian insistiendo. Últimamente, Anna y yo, empezábamos a pensar que lo que nos decían era verdad. Ahora ya lo he comprovado.

Hoy, Anna, se había acercado al pueblo para invitarlos a la fiesta de su 15 cumpleaños, ebían ser las 15h cuando se fue, son las 22h, todos ya estan en su casa y ella aún no ha vuelto. Ya me la imagino, con lo cabezones que son les habrá tenido que insistir mucho... Sea como sea ¡ya debería haber vuelto! ¿Y si le ha pasado algo? Mi madre la hubiera llevado a mi casa y ahora estaría en mi habitación, asustada, ¡¡acojonada!! ¿Y si fuese algo peor? ¡Algo más grave que un susto! Nos lo habrían dicho antes y yo estaría en el hospital, con mi madre, a su lado, haciéndole compañía...
Me habría llamado al móvil y me habría pedido que fuese a mi casa a estar con ella: ¿por qué no fue así? Lloraríamos juntas.

Anna, ¡felicidades! Te he comprado los bombones de chocolate con menta o naranja que tanto te gustan y con ellos te regalo también al camisa que tanto te gusta para que te la pongas cuando vayas a la fiesta el próximo fin de semana.

Anna, ¿por qué me dejas llorar sola? Ahora me mirarias con tu mirada tierna de madre protectora y me abrazarías, me abrazarías para hacerme callar y tranquilizarme. Así dejaría de llorar, pero... Pero solo de pensar lo que podría pero no esta pasando, mis sollozos son mayores.
Tu también llorarías. Habrás pasado mucho miedo. Sería yo la que te abrazaría y te empezaría a contar ecuerdos de cuando éramos perqueñas y reiríamos, no pasaríamos la noche hablando hasta que nos quedasemos dormidas. Puede ser, miraríamos una película para reírnos un poco de aún más recuerdos. Mañana por la mañana, cuando nos levantásemos, todo ya habría pasado y, poco a poco sería solo un recuerdo y una historia de miedo apra contar a nuestros hijos y nietos sobre ese pueblecito. Todo volvería a la normalidad y tendrías que preparar la fiesta otra vez y, pedir disculpas con tu elegancia y carita de ángel.

Sabes Anna, ahora te lo puedo decir, se que es tarde, pero nunca me he atrevido más que ahora, perdóname, nunca me perdonare habértelo dicho tan tarde.
Anna, durante toda la vida, desde quenos conocimos, te he tenido envidia, eres la chica perfecta, no hay ninguna como tu. Si ahora estuvieras aquí reirías hasta cansarte de esto y, después me vendrías con lo mismo que todos: que si yo soy muy especial, que si tu solo eres rara, y mil cosas más por las que ahora pagaría para que me dijeras. Anna quiero saber tu secreto, no lo entiendo.

A las 23h, tu madre se ha disculpado por ti y ha echado a nuestros amigos. Quería parecer tranquila pero no lo estaba. A mí me ha hecho subir a tu habitación y esperarte. Casi no había terminado la frase que ya estaba en otra sala. Su voz era extraña y sus ojos estaban tristes. Su alma era un océano de tristeza.
Hace un rato mi madre ha venido a hablar conmigo. Estaba nerviosa y la entiendo. Ha sido un golpe muy duro. Lo que me ha dicho no es fácil de decir.
Me ha explicado lo que te ha pasado en el pueblo. Al principio no me lo creía, no lo veía posible, pero ahora si. Si yo te hubiese acompañado esto no habría pasado.

Querido Diario, Anna llegó a invitar a los chicos a las fiesta de pijamas pero, mientras acababa de convencerlos, también les confesó una cosa que nunca me había dicho a mi.
Ella les creía, epro no soo eso, sino que ella también podía hacer cosas...
Cuando salieron los tres de la casadirigiéndose al tren para venir hacia acá, un hombre le dijo cosas obscenas a Anna. Ella se enfadó y lo fulminó con la mirada; pero no solo eso, sino que le hizo algo. Esa mirada penetrante color marrón amarillento,en realidad te penetraba y, aquel hombre experimentó una de las peores miradas de Anna.

Como he dicho antes, este era y es un pueblo muy tradicional y con creencias muy abtiguas.

Antes de que llegara a la estación al atraparon. De nada le sirvió correr. Era muy tarde. Se dio cuenta demasiado tarde de que aquello era real y ahora no lo podía controlar, de hecho, nunca lo había controlado.
La acusaron de brujería y al quemaron en la hoguera. Anna se consumió dentro del fuego.

¿Sabes lo que no entiendo? Supongo que se había dado cuenta antes de lo que le pasaba, ¿por qué no me lo contó? ¡Ella sabe que soy de fiar y que puede confiar en mi!

Yo me pregunto: ¿Lo hizo de verdad?

Hoy 18 de febrero Anna cumple 15 años, Hay, Anna, muere a los 15 años recién hechos.

¡¡Te echaré de menos Anna!!